Tras la millonaria inversión, la nueva rampa de acceso a la piscina recién construída está precintada porque es “resbaladiza”, y esa misma piscina se cerró al baño el pasado miércoles por razones que la Junta Municipal de Hortaleza no ha explicado. Al contrario, el concejal presidente del distrito, David Pérez, del Partido Popular, niega los problemas y asegura que la piscina está en “perfectas condiciones”.
Las nuevas piscinas del Centro Deportivo Municipal Luis Aragonés del barrio de Villa Rosa abrieron sus puertas, tras un largo año de obras, el pasado 13 de junio, un mes más tarde que el resto de piscinas municipales de verano. A pesar del retraso, la vicealcaldesa, Inma Sanz, admitió entonces que abrían antes de tiempo, porque el césped apenas había crecido. “Lo sorprendente es que alguien pensara que iba a crecer en pleno mes de julio con 40 grados de temperatura y sin sombras por los arbustos y árboles arrancados”, expone la Coordinadora de Hortaleza, un distrito que en los últimos tres años tuvo la mitad de sus piscinas municipales cerradas por obras durante los meses estivales. En el caso de las del polideportivo Luis Aragonés, el Ayuntamiento decidió el año pasado emprender las obras justo en verano, por lo que estuvieron cerradas durante la temporada de baño de 2024. Pero dos años antes, en 2022, ya ocurrió lo mismo cuando el Consistorio de José Luis Martínez-Almeida decidió ponerse a reparar, precisamente en verano, los daños que la borrasca Filomena había causado en los vestuarios de las instalaciones 18 meses antes. “Nos parece inadmisible que, después de tanto tiempo cerradas por obras, las piscinas del Luis Aragonés hayan reabierto incluso con zanjas abiertas en las zonas del césped, que está sequísimo en toda su extensión a pesar de las lluvias de esta primavera, algo incomprensible”, en opinión de la Coordinadora, en la que participan la mayoria de las asociaciones vecinales y culturales de este distrito del noreste de Madrid. “Hay tantas zonas precintadas que parece el escenario de un crimen”, ironizan desde la Coordinadora.
A pesar de las quejas, el controvertido concejal del distrito, David Pérez, aseguró en el Pleno de Hortaleza celebrado el pasado jueves que “la mayoría de los vecinos están muy satisfechos” con el resultado de las obras. “David Pérez vive en una realidad paralela y ningunea al vecindario del distrito, incluso a sus propios votantes”, critica la Coordinadora. “Sabemos que no es cierto, porque se están presentando quejas y reclamaciones por la desaparición de arbustos y arbolado, también por lo peligrosos que son los nuevos bordes de las piscinas, tanto que hay un cartel advirtiendo que son resbaladizos, y eso que la obra está recién acabada”, añade el colectivo vecinal, que anima al concejal a leer las últimas reseñas de los usuarios publicadas en internet: “Le va a resultar difícil encontrar alguna que sea positiva, cuando hace unos años era una de las piscinas más visitadas y mejor valorada de toda la ciudad”.
Para la Coordinadora, la actitud del concejal David Pérez sigue la línea de su permanente enfrentamiento con el vecindario desde que llegó a la presidencia de la Junta Municipal de Hortaleza en 2023, procedente del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. “En apenas dos años, ha prohibido fiestas y festivales de música organizados por el vecindario, ha eliminado el ciclo de conciertos de jazz más longevo de Madrid, ha impuesto una absurda ‘ley seca‘ de forma arbitraria en algunos festejos vecinales y ha desmantelado el centro municipal de participación ciudadana para dárselo a dedo a una entidad de fuera del distrito. También ha acabado con un proyecto vecinal de compostaje comunitario que era pionero en la ciudad de Madrid, ha reducido al mínimo las ayudas a entidades ciudadanas y, este año, expulsó a todas las asociaciones vecinales del recinto ferial de las Fiestas de Hortaleza”, enumera la Coordinadora. “Por todo ello, ya se le conoce con el apelativo del “concejal aguafiestas”, remachan estas entidades críticas con su gestión.