Lo hicieron con una ofrenda floral en la plaza de la Corona Boreal, un espacio céntrico de Aravaca que era lugar de encuentro habitual de la comunidad dominicana en la época del crimen.
Lamentablemente, en la plaza ya no queda rastro del icónico mural que en 2017 un grupo de jóvenes pintó en la fachada trasera del antiguo Centro de Mayores para perpetuar el recuerdo de Lucrecia, a pesar de que el pleno del Ayuntamiento aprobó su reposición en el mismo lugar, algo que siempre han reclamado los colectivos que organizan el homenaje.
En esta ocasión, el acto vecinal de recuerdo se realizó un día antes del aniversario de la muerte de Lucrecia para no coincidir con una concentración que tiene lugar el jueves a las 19:00 en la plaza de Lavapiés de Madrid impulsada por colectivos antiracistas.
Desde hace años, la Junta de Moncloa-Aravaca aprueba una declaración institucional por estas fechas con motivo del aniversario del asesinato de Lucrecia. Este jueves el pleno de distrito debatirá una proposición en este sentido que AV Osa Mayor y ACROLA esperan salga adelante con el consenso de todos los grupos políticos, algo que en estos momentos no está garantizado. De hecho, PP y Vox han anunciado que votarán en contra.
Lucrecia Pérez Matos fue asesinada en Aravaca el 13 de noviembre de 1992 por un grupo de jóvenes ultraderechistas cuando dormía en la discoteca abandonada Four Roses. La Justicia española lo consideró en su momento el primer caso de crimen racista en nuestro país.
Ante la actual extensión en nuestra sociedad de discursos y prácticas abiertamente racistas y xenófobas, que rompen la paz y la convivencia, las asociaciones vecinales de Aravaca subrayan la importancia de recordar a figuras como Lucrecia Pérez, que fue asesinada por ser el simple hecho de ser una persona migrante y sin recursos.

